sábado, 7 de julio de 2012

Trileros

A los escuchantes de 'La Bolsa y la vida', y a los lectores de esta bitácora, no les habrá pillado de sorpresa lo sucedido esta semana en los mercados financieros. Como anunciamos, y como viene sucediendo habitualmente, la artificial euforia creada ante los resultados, en este caso de la última Cumbre de la zona Euro, deja paso a la realidad y como dijimos "las cañas se vuelven lanzas".

Mientras los políticos y muchos medios de comunicación sigan empeñados en hacernos creer que reacciones puntuales de los mercados financieros marcan las tendencias que estos van a seguir, seguiremos chocando, frustración tras frustración, con la realidad. Por favor, ciudadanos, no caigamos en la doble trampa: ni esto se soluciona en un minuto, ni la crisis justifica cualquier recorte de derechos sociales.

Día tras días, siguen surgiendo escándalos relativos a la actuación de las entidades financieras y su altos ejecutivos. Esta semana hemos conocido como Barclays, y otras entidades, manipulaban el 'Libor' para obtener beneficios. No nos sorprenden noticias como estas, pues estamos seguros que si la supervisión de las entidades financieras hubiera funcionado, y funcionara con el rigor necesario, otro gallo nos hubiera cantado y otro gallo nos cantaría.

La manipulación del 'Libor', al igual que otros escándalos y estafas conocidas, demuestran que las entidades financieras se han olvidado del beneficio de sus clientes y de su responsabilidad social. La cultura del 'dinero por el dinero', del dinero como objetivo y no como instrumento, ha triunfado, y nos ha traído a este lodazal.

Acabaremos el comentario con un fragmento de la letra del tango "Cambalache" de Enrique Santos Discépolo que, en 1935, y refiriéndose al siglo XX decía: "Es lo mismo el que labora noche y día como un buey, que el vive de los otros, que el que mata, que el que cura o está fuera de la ley..." Tristemente esa realidad superó el siglo XX y sigue instalada en el siglo XXI. No es casualidad: esa triste realidad forma parte de los genes del sistema económico y financiero que padecemos. Mientras no encontremos alternativas al mismo y lo transformemos, seguirán de actualidad las palabras de Santos Discépolo.

Pero no se preocupen los escuchantes y lectores que la próxima semana acabaremos la temporada de 'La Bolsa y la vida' haciendo referencia a algún proyecto de economía solidaria que les haga reflexionar durante el estío.

7 comentarios:

Pakruber dijo...

¡Que razón tienes tocayo! De verdad que cada día, se asombra uno de que habiendo gente entendida en la materia, esta, esté gobernada por ineptos, inutiles, idiotas e ignorantes que dicen que sobran investigadores, en España ¿Se puede ser mas zote?. La p3ena es el estiocismo de la población, que hace que crean que tienen la razón, cuando hacen lo que hacen. ¡¡Triste, muy triste!!. un abrazo

Sue dijo...

Ya nada nos sorprende Paco, bueno sí, a mi me sorprende la capacidad de muchos para ignorar lo que se nos viene encima y hablar solo de deportes.

Un saludo.

Morrigang dijo...

http://lasfloresdelcactus.blogspot.com.es/

Unknown dijo...

¿Ajustes y recortes en los países periféricos o estimulación al consumo en los países centrales?
En el día de ayer, España ha anunciado una nueva serie medidas de ajuste. Medidas que supondrán achicar aún más la capacidad de consumo de la sociedad.
De esta manera el gobierno español cumple con las directivas impuestas por Europa como medidas necesarias para salvar a su sistema financiero y al modelo EURO.
Ahora bien, la interrogante es: ¿Serán efectivas estas medidas o solo contribuirán a contraer más la economía y generar más recesión?
Si traemos el análisis hacia un punto de vista terrenal, no hace falta ser un experto para saber que ajustar las cuentas públicas es necesario, si hay que pagar 100 y en caja tenemos 70, las cuentan no cuadran, y el dinero que falta no se puede inventar. Pero siguiendo este análisis básico, también es necesario verlo desde otro lado, es decir, si una familia que ingresa 10, y consume y paga impuestos por el gasto que realiza en función de su ingreso, baja su ingreso a 8, su consumo disminuirá inexorablemente, por lo cual su contribución fiscal también.
Este es el gran dilema que se discute en los parlamentos europeos entre quienes defienden el ajuste fiscal y quienes lo critican y promulgan por medidas que contribuyan al crecimiento.
La respuesta a este dilema, hoy por hoy no la tenemos, pero siguiendo con la idea de observar la situación desde diferentes puntos de vista, pensemos lo siguiente. ¿Qué harían España, Italia o algún otro país periférico de la zona EURO para paliar esta situación si no estuviesen atados a la monde única?
La respuesta sería “devaluar su moneda”, para así ganar competitividad y fomentar el crecimiento a través de las exportaciones suplirían al deprimido mercado interno. Una medida que siempre supuso ser el gran enemigo para los países centrales del EURO, principalmente para Alemania, ya que a partir de la depreciación de moneda de los otros países, sus exportaciones pasaban a resultar más caras.
La opción de la devaluación hoy no es viable, el EURO es una moneda consolidada y representa un logro político memorable, dejarlo caer supondría un retroceso social, político y económico de consecuencias gravísimas. Entonces, a partir de la premisa de que el EURO se tiene que mantener y que la manipulación de los tipos de cambios no es posible, nos queda pensar en la alternativa inversa, es decir, fomentar el consumo desde los países centrales.
Los países centrales no tienen los problemas de desocupación que hoy están sufriendo países como España, de hecho Alemania promulga la contratación de trabajadores españoles para cubrir su demanda laboral. Entonces, ¿Por qué no aplicar medidas para sea Alemania quién realmente actúe como el motor de consumo que saque a Europa de la crisis a partir de subas salariales y fomentos al consumo? Esto evitaría la estrangulación de los mercados internos de los países periféricos de Europa, asfixiados cada vez más por impuestos crecientes y corregiría a su vez el equilibrio laboral y productivo de los países centrales, en espacial el alemán.
A modo de conclusión, tal vez tanto una como otra medida puedan resultar ineficientes por sí solas, y tal vez sea una combinación de ellas la que realmente haga despegar a Europa nuevamente hacia el crecimiento colectivo.
Es cierto que los desequilibrios necesitan ser ajustados y que una sociedad austera no quiera pagar los excesos de otra sociedad más pródiga, pero es el momento para demostrar que un acuerdo de la magnitud del EURO, no debe responder solamente al desarrollo político y económico, sino también al desarrollo solidario de la sociedad europea.
Los invito a opinar y debatir sobre este tema a mi blog:
stocksploring.blogspot.es
Saludos
Wally

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

Si os eliminan de la parrilla cómo insinuas en el programa de hoy ¡ ME HABÉIS ALEGRADO LA MAÑANA! Estoy harto de pagar a señoritos giliprogres con mis impuestos. A Siberia, a purgar vuestras veleidades burgo-capitalistas os enviaba yo.

Pilar Juan dijo...

El estado se nutre de los impuestos,si se ha gastado mas de lo que se recauda,y mal gastado, pues hay que aumentar la presión fiscal,de esto nadie dudará.
Ahora,todo ciudadano tiene que hacer frente a esto, no sirve unos mas que otros.
Yo me pregunto habiendo tantos "profesionales de las finanzas"¿por que no se presentan ellos a las elecciones.